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Qué es el network marketing
Comencemos la casa por los cimientos: explicando exactamente en qué consiste este Network Marketing. Este se puede describir como un modelo de ventas donde ya no hay intermediarios de ningún tipo, sino que es la empresa la que se encarga de vender directamente el producto (o el servicio) a sus usuarios. No solo eso, sino que se le da la oportunidad al cliente de convertirse en distribuidor, incorporando así cada vez más miembros en la línea de trabajo. Gracias a esto, las ventas se multiplican rápidamente, puesto que aumentan los vendedores y, por ende, los compradores.
Se trata casi de una estrategia de venta “boca a boca”, puesto que los clientes tratan de forma directa con los vendedores. De esta manera, pueden preguntar sus dudas y descubrir más sobre el producto o servicio, consiguiendo una atención mucho más personalizada. Aunque es cierto que, con la llegada de las redes sociales e internet, es muy común ver Network Marketing totalmente online. Es fácil hallar un blog con este tipo de productos, o una cuenta de Instagram de un vendedor que se ponga en contacto con sus clientes a través de mensajes privados.
En conclusión, podríamos definirlo como un sistema de ventas en el que la empresa se relaciona directamente con sus clientes, y estos pueden pasar a ser distribuidores. Y mientras que es la empresa la que se encarga de todo lo relacionado con el producto, desde la fabricación hasta la publicidad, son sus distribuidores los que se encargan de las ventas. Por supuesto, obteniendo siempre un porcentaje de beneficios.
El Network Marketing no es marketing piramidal
Pese a que pueda parecerte lo mismo que el marketing piramidal, o las conocidas como estafas piramidales, no lo es. La principal diferencia entre estos dos tipos de modelo de mercado es que el Network Marketing recibe la mayor parte de sus beneficios del producto, mientras que el marketing piramidal lo recibe de reclutar otros vendedores.
Además, en este último tipo de negocio te suelen pedir que seas tú quien aporte dinero al entrar en el esquema. Es justo de ese aporte que reciben por cada nuevo miembro que se mantienen los anteriores, dando así esa estructura de pirámide en la que los de abajo van sosteniendo a los de arriba. No buscan vender realmente un producto, sino que lo que pretenden es conseguir más y más distribuidores dentro de su red, para así obtener más beneficios.
Tipos de Network Marketing
Hay diferentes tipos de Network Marketing, pese a que todos comparten unas características comunes. Los más conocidos son los siguientes:
- De un solo nivel: en este caso, no se crean infinitas redes de distribuidores. Los afiliados a las empresas ganan beneficios únicamente de sus ventas, como sucede en Avon. De esta manera, se escapa de la problemática que suelen traer consigo los negocios piramidales. No hay rangos, ni posiciones, ni redes complejas, sino un interés por vender un producto final.
- De dos niveles: pasamos ahora a ver un tipo de negocio diferente, en el que sí se pueden ir creando redes de distribuidores. No obstante, este no debe ser tu fuente principal de ingresos, sino que debes recibir prácticamente todos tus beneficios de las ventas.
- Multinivel: este es el más criticado, puesto que es cuando se forma realmente esa pirámide de la que hemos hablado. Obtienes beneficios tanto de tus ventas como de las ventas de tus distribuidores, e incluso de aquellos a los que tus distribuidores han captado.
Ventajas
Es innegable que este tipo de negocio tiene unas ventajas que pueden parecer muy interesantes a primera vista. La más atractiva de ellas es el bajo costo que tiene la entrada, puesto que no tienes que encargarte de abrir una empresa, gestionar un negocio tradicional, alquilar o comprar un local… Nada de esto. Estamos hablando, en la mayor parte de ocasiones, de empresas ya consolidadas y de renombre. Además, estas firmas suelen ofrecerte tanto formación como apoyo a lo largo del proceso, puesto que lo que les interesa es continuar creciendo.
No solo eso, sino que permiten disfrutar de un trabajo bastante flexible en cuanto a horarios y localizaciones geográficas. Es una gran alternativa para aquellos que quieren trabajar desde casa, por ejemplo, o para quienes viajan mucho. Asimismo, tiene un potencial de ingresos ilimitado, siempre y cuando vayas creciendo. Si te ayudas de ciertas estrategias de mercado, como el inbound marketing, y diseñas una buena plataforma web o un blog, ¡puede ser todo un éxito!
Inconvenientes
Mas es cierto que no podemos olvidar las desventajas. Como hemos señalado, tiene un gran potencial de ingresos, pero depende de ti y de tus posibilidades de hacerte conocido, o de conseguir ventas. Requiere cierto esfuerzo, especialmente al inicio, y no hay garantía de éxito. Aunque, gracias a internet, todo es bastante más sencillo, puesto que puedes crear un blog e ir dándote a conocer poco a poco.
Aunque este no es el único hándicap que puede que te encuentres por el camino:
- Hay un fuerte estigma social con respecto al Network Marketing, y es porque solemos asociarlo de forma directa con el marketing piramidal. Este bagaje, así como todas esas empresas que han usado este tipo de estafas para crecer, es lo que hace que hoy en día se piense tan mal de este tipo de negocio.
- Puede que encuentres una saturación del mercado, especialmente si una empresa tiene muchos distribuidores. Esto es algo que es interesante analizar previamente, así como hacer un estudio completo para ver si tienes “competencia” cerca.
- Requiere, sí o sí, habilidades de ventas. Aunque esto es algo que se puede ir ganando con el paso del tiempo, por suerte.
Ejemplos de Network Marketing
El Network Marketing no es, ni por asomo, algo nuevo o que haya surgido tras internet, sino que es algo que se remonta a décadas atrás. Para ser más exactos, a los años 30 en Estados Unidos. Fue un empresario estadounidense, Carl F. Rehnborg, el que vio por primera vez que este modelo de negocio podía funcionar. Comenzó a distribuir sus propios suplementos vitamínicos, y comenzó haciéndolo mediante regalos a sus conocidos. De ahí, pasó a venderlos a todos aquellos que ya los habían probado, y comenzó a hacerse famoso gracias a la publicidad boca a boca. Fue entonces cuando pensó en hacer crecer su red, y qué mejor que incorporando distribuidores para que le ayudaran con las ventas. Así nació la empresa conocida hoy en día como Amway.
Aunque hay más ejemplos famosos, como Avon o Mary Kay, ambos enfocados al mundo de la belleza. Sin duda, el más popular de todos ellos es el caso de la empresa Tupperware, que comenzó con reuniones en las residencias para vender los famosos recipientes.
