
Qué es la señalética
Comencemos, cómo no, con las definiciones. Cuando hablamos de señalética, nos estamos refiriendo a un campo concreto del diseño gráfico que busca crear y usar señales visuales para dar información. Dentro de esta técnica, se usan tanto señales como símbolos icónicos, colores, así como la combinación entre todos estos. Es algo que podemos encontrar en prácticamente todas partes, desde los espacios públicos hasta los establecimientos privados. Además, puede tomar formas muy diversas: letreros con texto y pictogramas, símbolos considerados universales, un código que sea fácilmente entendible…
La clave es que la información debe llegar al receptor de la forma más concisa posible, sin dudas ni problemas. Y, aunque puede que estés pensando en lo parecida que es a la señalización, realmente no es lo mismo. Aunque ahondaremos más adelante en la diferencia entre ambas, debes saber que la señalización es un sistema que se usa, especialmente, para guiar a las personas a destinos concretos. No busca influir en la imagen del entorno, pero esto es algo que la señalética sí que tiene como objetivo. Podemos resumirlo en que la señalización es algo mucho más conciso, y es el resultado de aplicar la señalética en un ámbito concreto.
La señalética, pese a que entra dentro de lo que consideramos diseño gráfico, tiene un carácter multidisciplinar. Y es que no solo usamos imágenes, símbolos, iconos o colores, sino que también debemos tener en cuenta la iluminación del espacio, la distribución, la ambientación… Porque todo influye.
Usos y utilidades
¿Qué busca la señalética, entonces? Pues depende un poco del tipo de técnica que usemos, pero su objetivo principal siempre suele ser informarnos de forma precisa de nuestro entorno. Por ejemplo, puede ayudar al usuario de una tienda a encontrar la marca que estaba buscando de la forma más rápida. Para ello, se ayudará de símbolos visuales que harán que identifique velozmente la zona en la que se encuentra esa firma en concreto, por ejemplo.
En las campañas de marketing, la señalética nos puede ayudar a crear una identidad visual de marca. En el ejemplo que hemos visto anteriormente se ve de forma concisa esto: un usuario busca una firma de ropa concreta, y la encuentra en la tienda al ver el logo. Este logo es un símbolo, una identidad visual que la empresa ha ido trabajando hasta llegar a conseguir. Y permite que aquellas personas que están interesadas en nosotros nos encuentren de forma rápida.
Esto no solo atrae a los clientes que ya nos conocen. Si jugamos bien con esta técnica de comunicación, podemos incluso llamar la atención de personas que hasta ese momento no nos conocían. Por nuestros colores, los símbolos que usemos, si añadimos imágenes que recuerden a descuentos u ofertas… Todo esto puede hacer que un usuario se fije en nosotros, y consigamos más ventas. No solo es importante en el negocio físico como tal, sino también en el negocio online. ¡E incluso más! Porque hablamos de una técnica de comunicación muy visual, imprescindible a la hora de crear una página web atractiva.
Junto a todo lo que hemos señalado, debes saber que hay otras ramas de la señalética, dependiendo del uso que hagas de ella. Por ejemplo, en el sector de la seguridad nos permite crear señales de advertencia o de evacuación que todos conocemos a simple vista. Si volvemos al ámbito del marketing, también nos permite reconocer eventos temporales, como conciertos, ferias… ¡O épocas de rebajas!
No debemos perder jamás de vista un factor clave, y es que la señalética implica conocer siempre el espacio donde se va a aplicar. Ya sea online o de forma física, es importante tener en cuenta qué rodea a ese símbolo o esa imagen antes de decidir dónde ponerla. Porque solo así sabremos si realmente estamos ante un uso eficiente y eficaz de esta técnica de comunicación.
Ejemplos de señalética
Como hemos señalado, hay diferentes tipos de señalética. Por ejemplo, está la señalética de orientación; un mapa en la calle que te indica dónde estás, o los sitios que tienes alrededor, entraría dentro de la señalética de orientación. Y con esto se puede jugar bastante: en Córdoba, llenaron las calles con una campaña de publicidad que empujaba a la gente a ir andando a los sitios. Para ello, crearon una red de lo que denominaron metrominuto. Conectaban puntos importantes de la ciudad mediante tramos de colores, como si de un mapa de metro se tratara, pero con la duración en minutos de lo que tardabas yendo de un sitio a otro andando. Una forma muy curiosa y novedosa de empujar a la gente a andar.
También podemos hablar de la señalética de información, que encontrarás en prácticamente cualquier edificio para indicarte dónde hay zonas importantes. O la corporativa, que es la que nos permite crearnos esa identidad de marca de la que hemos hablado. Es imprescindible que las empresas cuenten con una buena señalética, puesto que permitirá que sus clientes o empleados las identifiquen rápidamente.
Diferencias entre señalética y señalización
No, la señalética y la señalización no son lo mismo, pese a que pudiera parecérnoslo. Realmente, cuando hablamos de señalización estamos hablando de un ámbito de la señalética que se aplica de forma directa bajo una homologación, unas reglas, y que busca orientar a las personas que viajan en un vehículo. Son conceptos que, por su similitud, tienden a confundirse, pero que guardan esas diferencias que hemos mencionado entre sí.